EL DR. JOSÉ MANUEL VERDÚ CARTAGENA ES EL JEFE DEL SERVICIO DE ANESTESIOLOGÍA Y REANIMACIÓN DEL HOSPITAL COMARCAL DEL NOROESTE
Fotografía de Enrique Soler Sánchez
José Manuel Verdú es el jefe del Servicio de Anestesia del Hospital Comarcal del Noroeste. Hemos hablado con él para conocer más sobre este Servicio y cómo se han organizado para hacer frente la pandemia
1. Tras un año de pandemia y todavía inmersos en una de las olas más violentas de la COVID-19 en nuestra Región… ¿cómo viven los profesionales del Área IV esta pandemia?
La crisis sociosanitaria provocada por la pandemia de COVID19 ha supuesto un reto para todos los profesionales sanitarios, tanto por lo inesperado como por el alto grado de contagiosidad y el daño que es capaz de provocar en nuestro organismo.
En el Área IV, como en el resto de hospitales de la Región y de España, nos vimos desbordados por la situación, con la llegada masiva de pacientes con patologías respiratorias severas y que empeoraban bruscamente. No disponíamos de equipos suficientes de protección individual, ni suficientes aparatos de ventilación -tanto invasiva como no invasiva- para dar soporte a los pacientes con insuficiencia respiratoria grave, etc. Tuvimos que ir improvisando y poniéndonos al día en nuevos tratamientos….
Rápidamente, se creó un Comité Covid de crisis y se fueron subsanando todas las deficiencias. Se elaboraron protocolos de actuación y de tratamientos y planes de contingencia y, cuando vinieron la segunda y tercera ola, ya estábamos perfectamente preparados y con todos los recursos suficientes para abordarlas, aunque de una pandemia como esta siempre puedes esperar algo que te sorprenda.
2. ¿Cómo ha afectado y afecta la pandemia a los profesionales del Servicio de Anestesiología, Reanimación y Unidad del Dolor del hospital y a su actividad?
Nos ha afectado de pleno, alterando toda nuestra actividad. Hay que tener en cuenta que, después del Servicio de Urgencias -que es el frente de choque- los pacientes con patologías respiratorias pasan a la planta Covid atendida por el Servicio de Medicina Interna y los pacientes con insuficiencia respiratoria grave que precisan soporte ventilatorio externo con ventilación mecánica son atendidos, también, por nosotros.
Hemos tenido que orientar nuestra actividad asistencial hacia esos pacientes durante toda la jornada laboral y en las guardias, dejando a un lado las funciones habituales de un Servicio de Anestesia, el cual se suele realizar en su mayor parte en quirófano, y también las sedaciones en pruebas complementarias y exploraciones, la unidad del dolor, consultas etc.
Tuvimos que orientar todo a los pacientes afectados por COVID19 y, por supuesto, ponernos al día en todo lo que se publicaba y publica respecto a tratamientos, etc. Lo único que atendíamos en quirófano eran las urgencias quirúrgicas.
3. ¿ Cómo es el día a día del Servicio y cómo se ha reorganizado para cubrir la situación actual?
Tuvimos que reorganizar el Servicio completamente, duplicar el número de facultativos de guardia para que unos se dedicaran a los pacientes COVID y otros a los no COVID.
La Unidad de Reanimación posquirúrgica se reconvirtió en una Unidad para cuidado de pacientes Covid semicríticos y críticos. Por tanto, también tuvimos que rediseñar la distribución y estructura de los espacios y zonas intermedias aisladas para retirada de EPIs, etc.
La Enfermería tuvo que adaptarse a la nueva situación y eran las más esforzadas, teniendo que pasar varias horas con los trajes de protección, que –aseguro- es agotador.
Elaboré un plan estratégico de contingencia, con unas tablas predeterminadas y, según el número de pacientes que teníamos, se aumentaba el número de anestesistas, enfermeras, auxiliares y celadores (solo un paciente sedado con ventilación invasiva al que quieras poner en decúbito prono para mejorar su capacidad respiratoria, precisa a veces del concurso de hasta seis personas).
Todo se reorganizó.
4. ¿Cómo valora la situación actual de la especialidad en la Región : recursos humanos y técnicos, formación MIR…?
La especialidad de Anestesiología está en su mejor momento. La demanda de la cartera de servicios ha ido creciendo espectacularmente, haciéndose necesaria nuestra participación cada vez en más sectores del hospital.
La formación y capacitación de los profesionales vía MIR es excelente. Todos los que han ido incorporándose a nuestro hospital (varios en estos últimos años) llegaban perfectamente formados y capacitados para solucionar cualquier situación crítica que se les presente en una guardia de Urgencias y, en el día a día, te das cuenta de sus conocimientos y disposición.
Es una especialidad apasionante que te demanda muchos retos profesionales y en la que tienes que tener amplios conocimientos de todas las demás. Es, probablemente, la única en la que se da esta circunstancia. Por eso, creo que es la más completa.
Claro que toda esta demanda requiere de mayores recursos humanos y en este apartado sí somos deficitarios. La Administración, tanto a nivel nacional como regional, no fue previsora en este aspecto y padecemos un déficit de especialistas en Anestesiología, una especialidad central que precisa de muchos años de formación y en la que no se dan cada año las suficientes plazas MIR para cubrir todas las necesidades. Repito, las administraciones, tanto central como autonómica.
En nuestro hospital, tenemos asignada una plantilla de diez facultativos, incluido el jefe de servicio. En la actualidad, somos nueve y no hay disponibilidad en la bolsa de trabajo para cubrir esa vacante. En los demás hospitales se vive una situación parecida. Creo que en este aspecto, el Servicio Murciano de Salud debería replantearse la optimización de sus recursos humanos y distribuirlos más equitativamente, quizás desplazando a los recién formados en la especialidad durante un número determinado de años a las áreas comarcales o buscar otras opciones.
En cuanto a los recursos técnicos, hay que resaltar el esfuerzo en estos últimos años -y más en la situación actual de pandemia- de la Gerencia del hospital, Servicio Murciano de Salud y Administración, por dotarnos de toda la tecnología necesaria que hemos ido reclamando. Ese es otro de los aspectos en el que hemos mejorado sustancialmente. Disponemos de todo lo necesario para dar una asistencia de absoluta seguridad y calidad, similar a cualquier gran hospital que sea referente.
5. Los hospitales comarcales han insistido, históricamente, en la idea de que son “los grandes olvidados por las administraciones”… ¿cuáles son las demandas actuales de su hospital y de los profesionales que trabajan en él?
Es cierto que lo han sido durante muchísimos años pero últimamente se está tratando de poner remedio a esta situación. Se han hecho inversiones tecnológicas y en infraestructuras y se ha ido incrementando, en gran número, las ofertas de la cartera de servicios con especialidades que se han ido incorporando a ella: Neumología, Endocrinología, Unidad del Dolor y un largo etc.
Una reclamación histórica del hospital y de toda el Área IV es la creación de una UCI. Creo que es necesaria y que todas las áreas que carezcan de ella también deberían tenerla. Sería bueno para todos: pacientes y profesionales, Ahora mismo, el proyecto está ya realizado y aprobado y creo que en unos meses empezará a ver la luz.
Tenemos un problema estructural. La falta de espacio nos limita muchísimo en todos los proyectos de mejora que se quieren poner en marcha.
Desde la Gerencia se están habilitando espacios externos alternativos para mejorar y aumentar los Servicios y, en parte, se está consiguiendo.
Este problema de que se construyera un hospital sin la capacidad de ampliación suficiente nos lleva también a un déficit histórico de camas de hospitalización, lo que tiene una difícil solución. Este déficit de camas limita la actividad quirúrgica en gran medida y nuestra única solución, de momento, es fomentar la cirugía mayor ambulatoria y aumentar el trabajo por las tardes.
Tanto el director médico como el coordinador quirúrgico (cargo que represento) tenemos que hacer encajes de bolillo todas las semanas para poder cumplir con los plazos y sacar adelante las listas de espera. Añado que, en el proyecto ampliación, que incluye la UCI, también está proyectada la ampliación de la CMA. Por eso, es fundamental que las obras se inicien cuanto antes.
6. Un mensaje para los compañeros en esta situación tan complicada…
Qué decirles… Todos estamos en el mismo barco, viviendo esta situación tan complicada y nueva para todos. Acabamos de perder a dos magníficos profesionales, excelentes personas y grandes amigos y que son el ginecólogo Ramón Serna Sirvent y el internista Blás González Pina. Hemos estado más de 30 años juntos y la COVID19 se los ha llevado. Imaginad el dolor que ha supuesto para todos nosotros.
Por ellos, y para honrar su memoria y la huella que han dejado, les digo a todos mis compañeros que tenemos que seguir luchando con todo nuestro esfuerzo, que vamos a ganar esta batalla contra la pandemia, que hay que seguir adelante, sin miedo, porque la sociedad confía en nosotros.
Mucho ánimo.
7. Un mensaje para los ciudadanos…
A los ciudadanos del área IV, y a la población en general, quiero transmitirles tranquilidad y confianza. Disponen de un hospital con más recursos y mejores profesionales que nunca y tenemos todo lo necesario para poder atenderles con las máximas garantías.
Ya nos queda poco para, entre todos, poder vencer esta pandemia. No hay que desfallecer ni caer en el desánimo. Las vacunas ya se están aplicando, pero tenemos que seguir manteniendo las medidas de protección, usar las mascarillas, respetar las distancias de seguridad y lo lograremos, más pronto que tarde.
Publicado el 18 de marzo de 2021